2. Después de la erección de CHARIS y la aprobación de su estatuto por un periodo ad experimentun, el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida procederá a nombrar el Moderador, los dieciocho miembros del Servicio Internacional de Comunión y el Asistente Eclesiástico por un primer mandato de tres años. Han sido designados para ese nombramiento:
Moderador: Prof. Jean-Luc Moens (Bélgica)
Miembros del Servicio internacional de comunión:
1. América del Norte y Caribe (inglés)
S.E. Mons. Peter Leslie Smith (USA)
2. América del Norte y Caribe (español)
Sr. Andrés Arango (USA)
3. Centroamerica:
Sra. María Eugenia de Góngora (Guatemala)
4. América del Sur (español)
Sr. Pino Scafuro (Argentina)
5. América del Sur (portugués)
Sra Gabriella Marcia da Rocha Días (Brasile)
6. Asia:
Sr. Cyril John (India)
7. Asia:
Hermano James Shin San-Hyun (Corea del Sud)
8. Africa (francés):
Sr. Jean-Christophe Sakiti (Togo)
9. Africa (inglés):
Sr. Fred Mawanda (Uganda)
10. Europa:
Sr. Paolo Maino (Italia)
11. Europa:
Diácono Etienne Mellot (Francia)
12. Oceanía:
Sr. Shayne Bennett (Australia)
13. Diversos ministerios de la Renovación Carismática Católica:
Sr. José Prado Flores (Mexico)
14. Sacerdotes o religiosos carismáticos:
Rev. Etienne Vetö (USA)
15.Comunidades:
Sr. Jean Barbara (Libano)
16. Comunidades:
Diácono Johannes Fichtenbauer (Austria)
17. Asociaciones de fieles con reconocimiento de la Santa Sede:
Sig. François Prouteau (Francia)
18. Jóvenes de menos 30 años
Sig.na Giulia Rancan (Italia)
Asistente Eclesiástico:
Rev. P. Raniero Cantalamessa, O.F.M. Cap. (Italia)
Las personas mencionadas asumirán sus funciones en la solemnidad de Pentecostés 2019, día en el cual los estatutos de CHARIS entrarán en vigor. A partir de entonces, el Servicio Internacional de la Renovación Carismática Católica y la Fraternidad Católica de Comunidades y Asociaciones Carismáticas de Alianza dejarán de existir. El patrimonio de estos dos organismos deberá transferirse a CHARIS, a fin de procurar a este nuevo organismo los medios financieros para emprender la misión esperada por el Santo Padre.